¿ EXISTEN LOS VIRUS ?
ESTE TEMA, SE PUEDE LLEVAR A DEBATE, COMO OTRO TEMA CUALQUIERA. PERO...¿ QUE CLASE DE DEBATE ?. PORQUE A LA VERDAD, HAY GENTE QUE NO ENTIENDE DE DEBATES, Y LO QUE HACEN ES GRUÑIR Y NO DEBATIR PACIFICAMENTE.
EL DEBATE, DEBE DE SER, EDIFICATIVO E INFORMATIVO. NO PARA CREAR DISCUSIONES QUE NOS LLEVEN A ENEMISTARNOS.
EXISTEN OPINIONES Y OPINIONES, PERO DEBEMOS DE ENCONTRAR LA VERDAD INVESTIGANDO Y BUSCANDO.
POR MI PARTE, LO QUE LA CIENCIA LLAMAN VIRUS, EN REALIDAD FUERA DEL CUERPO NO EXISTEN.
SE HABLA DE QUE, NO PERMANECEN VIVIS MUCHO TIEMPO FUERA DEL CUERPO. LO CUAL...NO LLEGAN A LA EXISTENCIA. Y MENOS PARA PRODUCIR ENFERMEDADES.
¿ SABEIS QUE VIRUS SI EXISTEN Y ESTAN ECHOS POR MANOS DE HOMBRES ? LOS VIRUS INFORMATICOS. Y SON UN NEGOCIO REDONDO.
ESToS VIDEOS MUY EDUCATIVOS. Y NOS ENSEÑAN EN CUESTION AL ASUNTO.
https://lacienciaysusdemonios.com/2012/03/10/esa-cosa-que-llaman-virus-no-existe
https://drjoseangeldelgado.wixsite.com/plandemia/post/coviverdad-virus-no-existen
NO, NO EXISTEN LOS VIRUS, EXISTEN LOS EXOSOMAS.
Hoy quiero hablaros del mayor descubrimiento gracias a la FALSEMIA. En primer lugar no vamos a negar la existencia de muertes ni vamos a negar que haya habido personas «enfermas». No le estamos faltando el respeto a nadie. Al contrario, estamos arrojando luz, luz científica, luz biológica, para que todo el mundo pueda entender que:
1) El llamado SARS-COV-2 no existe, ni el SARS-COV-1, ni ningún virus patógeno que sea causante de ninguna enfermedad.
2) El material genético que hasta ahora ha sido secuenciado y asociado patológicamente con ciertas concretas enfermedades es material pertenecimiente a exosomas.
COMENCEMOS.
Los exosomas son diminutas vesículas cuyo papel principal es el de limpieza, es decir, sacar fuera de la célula, material de deshecho. Pero parece ser que los exosomas también cumplen una función de comunicación, portando material genético que es necesario implementar en otras células. Es decir, los exosomas cumplirían diversas funciones biológicas. Pero hoy nos vamos a detener en la función, ampliamente demostrada, que es la de limpieza.
En el origen, dentro de la célula, se generan unos globos que recogen material de deshecho. Material para ser expulsado fuera de la célula. Señalar que esto sucede tanto en plantas como animales, y por descontado, también en humanos.
Cada uno de estos «globos» son como un camión de basura lleno de bolsas de basura que se funde con la membrana celular y expulsa esas bolsas de basura. Cada bolsa de basura contiene material de deshecho. Estas bolsas de basura son liberadas fuera de la célula, y cada una de estas bolsas de basura sería una unidad, un exosoma.
CUANDO ENFERMAMOS.
Cuando enfermamos es porque nos encontramos en una fase muy concreta de un programa biológico. En esta concreta fase en la que solemos sentir diversos síntomas se produce también, cuando es necesario, regeneración de tejidos, y el camino de vuelta a la «normalidad», a una situación de re-equilibrio.
Bien, hay mucho tejido extra que suele generarse en muchos diversos programas biológicos, ese tejido extra debe ser expulsado del organismo, como hemos visto unos de los operantes en este proceso de limpieza son los exosomas.
Ahora bien, no es lo mismo una reconstrucción de tejido óseo, que tejido perteneciente a la mucosa de la laringe. Son dos tipos de tejidos celulares distintos. Por lo que los exosomas van a ser distintos. Nada tiene que ver una regeneración de tejido muscular si lo comparamos con tejido proveniente del endodermo, por ejemplo, del estómago.
Entonces, los diversos tipos de células generan de sí mismas, de dentro de sí mismas, los endosomas, esas «camiones de basura» que luego, fuera de la célula, observamos como exosomas.
DISTINTA ENFERMEDAD, DISTINTO EXOSOMA
Las enfermedades son parte de programas biológicos. Las enfermedades no son causadas por agentes patógenos del tipo microbios, tales como hongos o bacterias. De hecho, se ha creído que era así porque cuando se analizaba la actividad extra de hongos o bacterias en una persona enferma se concluía que eran estos microbios los causantes de tal o cual enfermedad. Pero esto fue un error, deliberado, al que nos condujo Pasteur, hace 150 años, un error que muchos biólogos, de Bechamp a Lanka, llevan todo este tiempo tratarnos de señalar, aunque lamentablemente, la industria farmacéutica, construida gracias al mismo Pasteur, ha alcanzado tanto poder que es muy difícil atender explicaciones que estén fuera del falso paradigma biológico.
Entonces, cuando estudiamos a Hamer, entendemos que cada patología, las diversas sintomatologías, se corresponden de forma precisa e inequivoca, siempre con ciertos concretos programas biológicos que son activados por los correspondientes choques biológicos. Y esto que acabo de escribir, debe ser estudiado aparte.
Cuando lo estudiamos y entendemos qué es un choque biológico, en qué circunstancias se produce, qué fases componen un programa biológico, qué relación guarda en estos procesos el sistema nervioso autónomo, qué relación existe entre el origen embriológico de un tejido, su función biológica, su alteración en qué momento del programa biológico y su conexión directa con el exacto tipo de choque biológico. Todo esto, precisa de tiempo para ser estudiado, asimilado y finalmente, comprendido.
Lo que señalaremos, de todo ello, es que diferente tipo de choque biológico, diferente tejido. Por lo tanto, diferente tipo de exosoma en el proceso de regeneración final del tejido alterado.
Como estos exosomas tienen una carga muy especifica en ciertos momentos del programa biológico, y están especificamente presentes en cierto específico momento, si son secuenciados y se compara su composición con la biblioteca de secuencias genéticas.... BINGO. Llegamos a la conclusión errónea de que hay unos virus causantes de la patología que nos lleva a tomar muestras del paciente y encntrar el mismo tipo de secuencia que en otros casos se encontró en mismas circunstancias patológicas.
Pero lo único que está pasando, realmente, es un mismo programa biológico, que afecta al mismo tipo de células, y por lo tanto genera el mismo tipo de exosoma. Pero el causante de la enfermedad ni es el exosoma ni un virus inexistente, dado que lo que hasta ahora llamamos virus, eran en realidad exosomas. El causante de la enfermedad es el choque biológico vivido por la planta, el animal, o en nuestro caso, los humanos.
Cabe mencionar que como buen mecanismo de limpieza, encontraremos exosomas también en casos de intoxicación, por ejemplo intoxicación realizada mediante vacuna.
La radiación es un ataque que no sigue el proceso bifásico descrito por Hamer, pero cuando la radiación altera los tejidos orgánicos, lógicamente, encontraremos también exosomas.
CONCLUSIÓN:
En tiempos de guerra hay grandes avances, y sin duda, desvelar gran parte del misterio que durante años ha habido con los llamados «virus» es una gran noticia.
Queda por delante investigar ese papel comunicativo del exosoma, y su participación en la actualización genética del ser vivo.